Por RT En Español
El mandatario también propuso la firma de «un acuerdo mundial» entre los jefes de Estado y los propietarios de las patentes de las vacunas contra el coronavirus para garantizar el acceso universal a estos fármacos.
El presidente de Perú, Pedro Castillo, intervino este martes en el 76° Período Ordinario de Sesiones de la Asamblea General de las Naciones Unidas, en Nueva York.
Durante su primer discurso ante este foro internacional, Castillo, quien fue maestro rural en Perú antes de ocupar la Presidencia, abogó por priorizar la educación en cada país.
«Como maestro, como gobierno, debo decirlo, invirtamos en la educación, porque un pueblo educado jamás será engañado», enfatizó.
Asimismo, añadió: «Estoy convencido que la capacidad de la sociedad para superar los complejos desafíos que enfrentamos pasa por la educación que reciben nuestros hijos, nuestros niños, nuestros jóvenes».
Relacionado a ello, llamó la atención sobre los millones de niños y adolescentes en el mundo que están sin escolarización; situación que, dijo, «se ha agravado con la emergencia sanitaria».
Primer maestro presidente
En el estrado, el mandatario recordó que es la primera vez en la historia de Perú que un maestro de escuela rural «asume la conducción» de su país.
«Esa responsabilidad me obliga con los pobres, con los marginados, con las poblaciones vulnerables, los emprendedores, las clases medias que tanto han sufrido la pandemia y, por su puesto, con todos los peruanos sin exclusiones», manifestó.
El mandatario recalcó «la vocación y la filiación democrática» de su gobierno y su compromiso «con la justicia social», tras recordar que a pesar de que su país registra 25 años de crecimiento económico acumulado, eso no se ha traducido en el beneficio de las mayorías.
«Por ello, es necesaria una transformación social que permita a todos los peruanos y peruanas gozar de sus derechos económicos y sociales», señaló Castillo, quien consideró que ese cambio debe garantizar los «derechos a la educación, a la salud, al empleo decente, al salario digno, a la seguridad social, a la vivienda».
Asimismo, dijo que en Perú es necesario construir un «nuevo contrato social» que «asegure la gobernabilidad democrática, con paz y cohesión social».
Acuerdo mundial
El mandatario peruano también se refirió a la grave situación que se generó por la pandemia del coronavirus a nivel mundial. Al respecto, dijo que las vacunas «han abierto el camino y la fe de la humanidad para asumir la convicción de que esta batalla será ganada».
No obstante, criticó «la incapacidad del sistema internacional para cooperar bajo los principios de la solidaridad y la eficiencia», puesto que mientras algunos países tienen excesos de vacunas, otros aún están a la espera para inmunizar a su población.
Ante esa realidad, propuso la firma de «un acuerdo mundial» entre los jefes de Estado y los propietarios de las patentes de las vacunas contra el coronavirus, que permita garantizar el acceso universal a estos fármacos para todos los habitantes del planeta, sin discriminación ni privilegios.
Por otro lado, respecto al cambio climático, uno de los ejes temáticos del debate de la Asamblea General de la ONU, Castillo informó que Perú asume la meta de convertirse en un país «carbono neutral» al 2050.
Como expresión de ese compromiso, anunció que su gobierno declarará la «emergencia climática nacional».
Rechazo al terrorismo
Castillo también aprovechó el foro para reiterar su condena y rechazo al «terrorismo en todas sus formas», al tiempo que señaló que «Perú ha sufrido la violencia terrorista» y «ha sabido imponerse a ella».
«El terrorismo nunca ha sido ni será un medio para la transformación social; la violencia solo genera destrucción, violaciones a los derechos humanos y sus víctimas son los más pobres y los desposeídos», enfatizó.
Por ello, dijo que su país respalda toda acción para combatir al terrorismo y que, en el ámbito regional, Perú está comprometido con la paz y seguridad internacional.