El reloj marcaba las 6:10 de la tarde del viernes 3 de agosto, y en Moncagua se vivía un ambiente de alegría, protagonizada por los jóvenes que recibían la caravana que venían en peregrinación con ruta a Ciudad Barrios cuna de Monseñor Oscar Arnulfo Romero.
Pese al cansancio de dos días de caminar, el Cardenal Monseñor Gregorio Rosa Chávez agradeció a la comunidad católica de la parroquia Nuestra Señora de la Candelaria, por el recibimiento donde asistieron más 1,500 personas.
Y antes que partieran a su próximo destino, el religioso pidió a uno de los peregrinos leer el lema con el que se titulaba la peregrinación “Caminando con San Romero, para construir la Paz”
Era un nuevo día, el reloj marcaba las 7:25 de la mañana del sábado 4 de agosto. A esta hora el pueblo romerista emprendió camino desde Chapeltique hasta Ciudad Barrios. Alabanzas y gritos de júbilos se escucharon durante el recorrido.
El Cardenal menciono que en este último tramo la cantidad de peregrinos había incrementado “Cada día más numerosa es como un rio al revés, en el cauce donde se origina es más caudaloso, venimos aquí miles de persona caminando, con una gran alegría”
Para la fe de los católicos no hay edad, ni raza, ni nacionalidad, porque durante el recorrido niños, jóvenes y personas adultas acompañaron las reliquias de Monseñor Romero.
“Yo me siento feliz entusiasmada, porque esto refuerza mi fe y mi seguridad, de que Monseñor Romero fue y es un Santo y ha revivido en su pueblo como él lo dijo, moriré pero resucitare en mis feligreses” dijo una de las participantes.
En esta peregrinación fue tan grande la fe que no importo el sol, ni mucho menos el cansancio para doblegar el entusiasmo de los fieles.
Llegaron pasadas de las 3 de la tarde, y las emociones se dejaron sentir cuando estaban frente al lugar que vio nacer al profeta y mártir y muy Pronto Santo de la Iglesia Católica: Monseñor Oscar Arnulfo Romero.
Esta caminata es parte de la preparación para la canonización del Beato, que tendrá lugar el 14 de octubre en la plaza de San Pedro, en el Vaticano.
Por Prensa Izcanal.