Hasta las 4:50 pm de este martes en el país se registraban 1,824 casos activos de COVID-19. De estos, las autoridades reportan 76 personas fallecidas y más de 2 mil sospechosos. Profesionales de la salud aseguran que la falta de concientización sobre el “modo coronavirus de vivir” puede afectar la salud de la población.
La noche del 15 de junio, a pocas horas de iniciar el plan de reactivación económica que permitiría la apertura de empresas y actividad económica por fases, las autoridades de salud reportaron 115 casos nuevos de coronavirus, sumando 3,941 casos en todo el país.
De ese total de casos, 1,824 se mantienen activos, 2,041 se recuperaron y 76 han fallecido. Aparte hay 2,786 casos sospechosos.
Los departamentos de San Salvador (1,984) y La Libertad (397) son los que más reportan casos positivos de coronavirus.
La curva sigue al alza, pese a la cuarentena de más de 80 días aplicada en el país.
Para la doctora, Karla Juárez, salubrista e integrante del Colegio Médico, la población no sabe como vivir la “cuarentena voluntaria”, porque no hay indicaciones. Dijo que es urgente que se aprenda a convivir con el virus, que se conozca, que se sepa la prevención.
“Los protocolos tuvieron que haberse dado a conocer a la población con mucho tiempo de anticipación. Si hemos estado casi tres meses en cuarentena, tuvimos que conocer los pilares de la pirámide de prevención y el ‘modo coronavirus’ de vivir, que es al que vamos a salir y que ya no puede desaparecer”, afirmó la doctora en una entrevista radial.
Dichos pilares son: el uso de mascarilla, el lavado de manos y el distanciamiento social.
Para Juárez, las personas no han asimilado esta situación porque no existen los mensajes adecuados que concienticen sobre la prevención del virus.
“Lo único que se nos ha repetido es el ‘quédate en casa y lavate las manos’. Pero si estoy encerrada en mi casa y no dejo entrar a nadie no hay necesidad de lavarse cada 20 minutos. Ahora, esta cuarentena no podía ser levantada de un día para otro, porque nosotros hemos estado guardados todo este tiempo en el que hay una afluencia de varias enfermedades”, agregó.
“No podemos creer que todos se están informando igual que nosotros, ese es el otro gran error: Creemos que todos leen lo que ponemos y que están en la misma sintonía y no todos tenemos acceso a todo”, expresó.
Para la doctora, es importante que las personas “dejen de especular que tiene o no la enfermedad”, con la apertura de pruebas para toda la población y no solamente para algunas personas priorizadas, como han anunciado autoridades.
“¿Cómo puedo saber yo que no tengo coronavirus y que no lo voy a andar regando por todos lados? Una cosa bien importante para esto es abrir las pruebas. Si a mí hoy me da una fiebre y en la noche me tomo una acetaminofén y mañana amanezco bien. La gente no se queda en su casa, se va para la calle porque necesita vender para tener qué comer”, afirmó la integrante del Colegio Médico.
“Tenemos mucho subregistro, tenemos mucha gente que no sabe, no supo y no va a saber si fue coronavirus lo que tiene. Eso también permitiría que uno ande con tranquilidad y así poder colaborar más con otra persona a quien ya le haya dado”, expresó.
Misma opinión tiene Guillermo Argueta, médico y máster en Salud Pública, quien considera que el tener dudas sobre si la información oficial o si los datos que se presentan en paginas oficiales son sesgados o no, “es crítico” ya que las proyecciones matemáticas y los estudios epidemiológicos que se pueden realizar dependen de la calidad de estos datos.
“Si todavía a nosotros no nos queda claro cuántos sitios están procesando las pruebas y cuántas se pueden procesar en un día, cuánto tiempo demora desde la toma de la prueba hasta el procesamiento de ésta, y además con declaraciones que ha hecho el ministro de Salud diciendo que hay pruebas que se priorizan por sobre otras, entonces nos queda un poco de duda. Hay que revisar los tuits, conferencias, porque la página web te da unos números muy fríos, y no sabes el origen ni cuánto demoró ni cuestiones que podrían aumentar la certeza en estos datos”, detalló a la Red Informativa de Arpas.
Argueta recordó que el país reactiva su economía en medio de la fase III anunciada por el MINSAL, lo cual, según lo que se conoce, determina algunos parámetros para tratar los casos.
“Establece que, por ejemplo, para dar un caso como sospechoso se basan nada más en la clínica y que a partir de esta fase se trataran los casos que tengan sospecha leve, con síntomas leves, en el hogar, dando la responsabilidad de los cuidados y de los posibles contagios a la población, a los individuos. Es decir, no es que a estas personas se les vaya a dar un equipo de protección y no sé si hay personal suficiente en este momento para darles el seguimiento”, dijo.
El médico recordó que el virus “no se transmite por el aire, no es que va a llegar a través de una ventana. Es de persona a persona. Y hemos visto estudios recientes que hablan de que tienen que ser bajo condiciones de mucho tiempo de exposición y en espacios cerrados y reducidos”.
¿Necesita el país medidas de supresión de derechos para detener los contagios? Argueta dijo sobre esto que hay que considerar que ya no tenemos las pruebas disponibles necesarias, porque se está priorizando en el personal de primera línea.
Datos del portal internacional endcoronavirus.org, manejado por un conglomerado de profesionales en coordinación con el New England Complex Systems Institute (NECSI), reveló que El Salvador es uno de los países cuya curva de contagios tiende al aumento y que requiere de atención inmediata.
Por: ARPAS.