“Se me olvidó”, “no me gusta”, “me sofoca”, “me da hueva”, son algunas justificaciones que dan los ciudadanos que no utilizan la mascarilla en las calles de San Salvador, pese a que la amenaza de una nueva cepa, esta a la vuelta de la esquina.
Los salvadoreños aún no logran percibir el daño que podría causar el no tomar las medidas de bioseguridad ante la pandemia del Covid19.
Entre las que se destacan el uso de la mascarilla, el lavado de manos con agua y jabón, desinfectado de manos con alcohol gel cuando no se pueda lavar con agua, así como el guardar el distanciamiento social.
Pero, solo portar una mascarilla reduce en un 95% la posibilidad de contraer el virus, según han manifestado las autoridades de Salud.
En un recorrido el centro de San Salvador se constató que decenas de salvadoreños han hecho caso omiso a dicha recomendación.
Desde tempranas horas transeúntes y comerciantes no portaban la mascarilla, así como no guardan el distanciamiento social de dos metros.
El riesgo aumenta con las festividades de fin de año, ya que miles visitan el centro de la capital en busca de la cena del 31 de diciembre o la ropa de estreno entre otros productos que se utilizan en esta época.
Al consultar a las personas porqué no portaban mascarillas, entre otras respuestas fue que se “suda mucho”.
También una comerciante de camisas comentó que no utiliza la mascarilla porque es “asmática”, y se “ahoga” cuando la tiene puesta.
Y al observar por 30 minutos a un vendedor de bananas enfrente del Museo de Monedas, él no uso en ningún momento la mascarilla, a pesar de atender a los clientes que le compraban.
Otro ejemplo de no tener conciencia sobre el contagio es el de Jorge Alberto, como se identificó, quien afirmó que “el virus le va a dar, a quien le tenga que dar”.
Y agregó que el coronavirus puede afectar a la persona “dependiendo de sus defensas”, él consideró además que tiene “buenas defensas” por lo cual, no utiliza el cubrebocas.
Un señor de aproximadamente 40 años que se iba cruzando de la Plaza Barrios a la Plaza Libertad, sin mascarilla, al preguntarle por el tapaboca, respondió sorprendido que “se le había olvidado”.
Metió su mano izquierda en su bolsillo, sacó una mascarilla quirúrgica, la mostró y afirmó que se la iba a poner, caminó unos 10 metros de donde brindó las declaraciones y la volvió a meter en su bolsillo, siguiendo su camino sin la el cubre bocas.
Otros dos comerciantes del centro que precisamente vendían mascarillas no las portaban porque afirmaron que “no les gusta” y aparte “les da hueva”, como se dice en lo salvadoreño; pero están “conscientes” que al no portarlas pueden infectarse del covid19.
En el centro capitalino se puede apreciar a muchas personas aglomeradas comprando, sin tomar en cuenta las recomendaciones.
Es de destacar que no todo es negativo, porque así como hay personas inconscientes, hay cientos de salvadoreños que transitan por el centro de San Salvador, con su mascarilla.
“La gente ignora cual es la magnitud de la pandemia”, mencionó una mujer llamada “Johana”, quien relató que es parte del personal de limpieza del Hospital General del Instituto Salvadoreño del Seguro Social (ISSS).
“Yo me meto a los cuartos de Covid y sé cómo día a día muere gente, y es cosa que la mayoría de gente ignora”, enfatizó.
El uso de la mascarilla es para evitar que “nos enfermemos, hay que estar prevenidos”, comentó, Alessandra Arias.
Esta mujer dice que ha visto a personas en el transporte público sin mascarillas, a los motoristas de las unidades.
“Nosotros debemos estar conscientes y sensibilizados sobre esta enfermedad para no afectar a nuestros seres queridos”, enfatizó Arias.
Actualmente, no existe una normativa que regule el uso obligatorio de las mascarillas en espacios públicos, pero debería de haberla, expresaron los capitalinos.
Ismael Saravia, quien estuvo cerca de la Plaza Morazán, tomándose una foto con su hermano menor, afirmó que “nunca se había visto una enfermedad que fuera a nivel mundial y si esta se mantiene sí debería ser obligatorio el uso de mascarilla”.
Y añadió que se debe vivir una nueva normalidad, guardando las medidas de bioseguridad, esa es la clave para no seguir expandiendo este virus.
“Aunque nos queramos regresar a la antigua vida que teníamos va a hacer muy difícil, ahora nos toca adaptarnos”, indicó.
Y ante la amenaza de la nueva cepa de Covid-19, los salvadoreños deben de guardar más las medidas de bioseguridad porque es aún más infecciosa, han dicho las autoridades de Salud.
Y es que los casos van en alza, el viceministro de Gestión y Desarrollo en Salud, Carlos Alvarenga, manifestó que la tendencia es alrededor de 300 casos diarios de Covid19.
Hasta la fecha, las autoridades del Ministerio de Salud han reportado más de 45 mil casos confirmados de coronavirus, de los cuales más de 3,500 están activos, más de 40 mil recuperados y un poco más de 1,300 han fallecido.
Las autoridades de Gobierno pidieron a los salvadoreños que no bajen las medidas de bioseguridad, y que sean responsables en no visitar a familiares que están en condiciones vulnerables, ya que, de ser así, en enero del próximo año, El Salvador podría estar ante una segunda ola de contagios por Covid19. Lo que significaría volver a tomar medidas drásticas.
Por: Co Latino.