La pandemia del coronavirus y la respuesta gubernamental a la enfermedad sin un plan real y concreto, se convirtió en una batalla política en los últimos meses.
Los conflictos tienen a su base las acusaciones del presidente a los diputados y magistrados de la Sala Constitucional de la Corte Suprema.
Las diferencias entre los políticos salvadoreños han interferido en la respuesta de las autoridades ante la pandemia del coronavirus, principalmente la respuesta del gobierno de Nayib Bukele.
“A Bukele y su grupo le quedó grande la camisa. No logró articular, coordinar, ni planificar para enfrentar adecuadamente la pandemia”, aseguró el secretario general del FMLN, Oscar Ortiz, sobre las decisiones del mandatario que no hizo nada para regular la apertura de la economía.
Bukele tensó las relaciones con los poderes Legislativo y Judicial al negarse a sancionar y publicar el decreto legislativo 661 para que después los diputados actualizaran la normativa, en medio ya de una crisis económica y sanitaria.
“El país comenzó a moverse por sí solo para resolver los problemas, gracias a un presidente que no tiene la menor idea en qué consiste gobernar”, criticó Ortiz, quien ejerció la vicepresidencia de la república en el quinquenio 2014-2019.
Bukele vetó todo decreto legislativo con herramientas legales, sanitarias, económicas y fases de apertura que no incluyera una cuarentena estricta sin importarle violar los derechos ciudadanos reconocidos en la constitución de la república, por eso, Ortiz insiste en asegurar que a Bukele le quedó grande la camisa de la presidencia de la república.
Por: Verdad Digital.