Comunidades de Nahuizalco, Sonsonate, denunciaron la posible instalación de una nueva represa en el río Sensunapán, afectado por la explotación que de él hacen, al menos, otros seis proyectos similares.
A través de un video, habitantes del lugar señalaron que hay intenciones del Ministerio de Medio Ambiente de generar otro estudio de impacto ambiental para la posible ejecución del proyecto.
“Este proyecto la consultaron en el 2012 y las comunidades indígenas de Nahuizalco dijimos no a la represa”, recordó Enrique Carías, uno de los habitantes.
Los pueblos originarios denunciaron que se están violentando sus derechos. “Como pueblos indígenas decimos no a proyectos de muertes, no a la represa”, afirmó Pedro Rodríguez, otro de los líderes que aparece en el video.
Añadió que, entre otras cosas, se estaría vulnerando el convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) sobre Pueblos Indígenas y Tribales.
“Están quitando los recursos que nuestras abuelas tienen para ir a alimentarse. Si nos quitan el agua hacen muerte a nuestros ríos y no vamos a tener ese caudal que ahora tenemos”, agregó.
Ante la denuncia, la Unidad Ecológica Salvadoreña (UNES) mostró su respaldo a las y los habitantes.
“Hay que recordar que en el río Sensunapán existen siete represas hidroeléctricas, es por eso que estos actores comunitarios destacan que el desarrollar otra sería darle un tiro de gracia a los ecosistemas hídricos que forman parte del río Sensunapán”, dijo a la Red Informativa de ARPAS, Salvador Recinos, integrantes de la UNES.
Por: Prensa Izcanal / ARPAS.