El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, anunció que el país recortará la producción de petróleo, cerrará pozos y aumentará la capacidad de refinación de las plantas, para hacer frente a la crisis derivada por la caída de los precios de petróleo a nivel internacional.
«A finales de este mes inicia el recorte de producción que se acordó en el mundo y esto debe de tener algún efecto, de todos modos nosotros estamos preparando una estrategia que consiste en refinar más petróleo crudo para comprar menos gasolina en el extranjero», explicó el mandatario en su conferencia de prensa matutina del 22 de abril.
El presidente hizo alusión al acuerdo al que se llegó dentro de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) el 10 de abril pasado, en el que México se comprometió a reducir en 100.000 barriles diarios su producción de crudo.
López Obrador indicó que su administración tuvo dos aciertos que ayudan a mitigar la crisis. El primero es que el inicio de la exploración en 19 campos petroleros nuevos, así como la perforación de más de 200 pozos nuevos que ya están prácticamente terminados, permite al Gobierno mexicano «cerrar la válvula de estos pozos sin que se pierda presión».
Lo segundo, según el presidente, fue el plan para rehabilitar las refinerías que se puso en marcha desde el inicio de su gestión, pero que se reforzará en las próximas semanas. «Desde que llegamos decidimos rehabilitar las refinerías, tenemos ya herramientas, equipos, se autorizó el presupuesto de este año de 10.000 millones de pesos (411 millones de dólares) adicionales y esto nos va a permitir ir avanzando en el volumen de refinación», apuntó.
Señaló que hace dos días, las seis refinerías del país procesaron 800.000 barriles de crudo, lo que implica una capacidad de refinación cercana al 60 % de la producción de crudo nacional.
Otro factor que, según López Obrador, ayudó a disminuir los impactos de la crisis, es la adquisición de seguros que permiten a México recibir ingresos adicionales a pesar del desplome de los precios internacionales.
Aunque se tenía previsto presentar este miércoles el plan energético para sortear la crisis petrolera, el mandatario señaló que dicho plan se anunciará hasta el próximo viernes 24 de abril, debido a que el gabinete todavía se encuentra realizando los análisis necesarios ante un escenario muy volátil.
Decreto para ayudar a Pemex
Entre otras medidas, la Secretaría de Hacienda otorgará un estímulo fiscal por 65.000 millones de pesos (2.674 millones de dólares) a la compañía estatal Petróleos Mexicanos (Pemex), para mitigar el impacto negativo en sus finanzas.
Por este motivo, la dependencia publicó en el Diario Oficial de la Federación un decreto por el que se reduce el porcentaje que la empresa paga al Estado por el Derecho de Utilidad Compartida. Esto representa poco más del 80 % de los impuestos que paga la petrolera por la producción de crudo.
El ingreso que recibe México por el petróleo es uno de los principales componentes en la conformación del presupuesto anual con el que se financian obras públicas y los servicios básicos.
El pasado martes, el precio de la mezcla mexicana de petróleo alcanzó el primer valor negativo de su historia, al cotizarse en -2,37 dólares por barril, según datos preliminares de Pemex. Sin embargo, horas después repuntó hasta alcanzar los 7,12 dólares por barril.
La caída de los precios del petróleo en EE.UU. provocará que dicho país importe menos petróleo mexicano, lo que tendrá efectos sobre toda la economía mexicana.
De acuerdo con un informe reciente de la Comisión Económica para América Latina (Cepal), el Producto Interno Bruto de México registrará una caída de 6,5 %, la segunda más abrupta de la región, solo detrás de Venezuela.
Por: RT.