Un millón de indígenas que viven en las selvas del Amazonas están en peligro inminente debido a los graves incendios forestales que asolan la región, que ha perdido más de 500.000 hectáreas en las últimas tres semanas.
En particular, a raíz de la catástrofe, en el territorio indígena de Arariboia en la Amazonía de Maranhão, el pueblo Awá corre el riesgo de desaparecer. Los Awás viven sin contacto con el mundo exterior y son uno de los últimos pueblos indígenas aislados del planeta.
«Muchos consideran una emergencia para el planeta, y tienen razón, pero es más una emergencia de derechos humanos para el millón de indígenas que han vivido de manera sostenible en estas tierras desde tiempos inmemoriales», señaló por su parte el Grupo Internacional de Derechos de las Minorías (MRG).
El director ejecutivo de MRG, Joshua Castellino, indicó sobre las comunidades indígenas que «sus vidas y su forma de vida están en peligro desde hace décadas debido a un gobierno que sigue desmantelando la protección de los derechos indígenas sobre la tierra en favor de la tala y la minería».
«La exclusión de los brasileños indígenas del debate sobre su y nuestro patrimonio colectivo ha diezmado su cultura en el último siglo…», indicó Castellino.
«También ha desarmado y dejado desarmados y discapacitados a los únicos guardianes de la selva en un momento en el que por fin el mundo se ha percatado de la importancia que tienen para la sostenibilidad de la vida en este planeta», según Castellino.
Se estima que son 350 pueblos originarios los que habitan entre Brasil y Bolivia sumando cerca de 1.5 millones de habitantes de la cuenca amazónica los que podrían verse afectados por esta crisis ambiental.
Por: Prensa Izcanal / teleSUR.