Ante la alta tasa de incendios ambientales y alerta de sequía severa el gobernador del estado brasileño de Acre, Gladson Cameli decretó el estado de emergencia ambiental.
El decreto se publicará este martes en la Gaceta Oficial de Acre. Los criterios que llevaron al gobernador Cameli a declarar la emergencia fueron presentados por el Centro Integrado de Geoprocesamiento y Monitoreo Ambiental (Cigma).
Los datos de Cigma, muestran que durante el pasado fin de semana se registraron más de 700 incendios. Entre enero y agosto de este año, los expertos afirmaron que ya se han registrado más de 4.000 puntos calientes, de los cuales 3.578 se registraron solo en agosto.
“Estamos en medio de una pandemia y estamos haciendo todo lo posible para tratar de llamar la atención de la gente sobre los problemas que traen los incendios a la salud de la población. Es tolerancia cero para los delitos ambientales. No puedes seguir como estás, especialmente en el área urbana ”, dijo Cameli.
En la región del Pantanal que se extiende principalmente por el estado de Mato Grosso del Sur y partes aledañas de Bolivia y Paraguay, los incendios han consumido 17.500 kilómetros cuadrados de bosque, lo que equivale a más del diez por ciento del área total de uno de los humedales más importantes del mundo. Situación que ha sido negada por el gobierno de Jair Bolsonaro.
De acuerdo al Instituto Nacional de Investigaciones Espaciales (Inpe) nunca se habían registrados tantos puntos críticos entre enero y agosto como ahora.
Hasta el 18 el Inpe había reportado 7.727 incendios, lo que representa un aumento del 211 por ciento respecto al mismo período del año pasado.
Por: teleSUR.