En un abrazo se fundieron. 36 años después de que una guerra les separara, María volvió a sentir el abrazo de sus familiares, en un encuentro propiciado por la Asociación Pro-Búsqueda en el municipio de Nueva Trinidad, Chalatenango.
“Gracias a toda esta gente que ha luchado por este día”, dijo con voz eufórica una de sus familiares.
Eduardo García, director de Pro-Búsqueda, dijo que ésto “debe servir de denuncia ante un Estado indolente que no busca a sus hijos e hijas desaparecidas”.
Este nuevo reencuentro se dio en el marco de una fecha importante para la Asociación que, hasta hoy, ha logrado resolver 451 casos de niñez desaparecida durante el Conflicto Armado en El Salvador: el 14 aniversario del fallecimiento de su fundador, el padre Jon Cortina.
Pro-Búsqueda prevé cerrar el año con 10 casos resueltos de desaparición. En sus 25 años de trabajo, esta asociación ha recibido 1,005 denuncias de niñez desaparecida. De los casos resueltos, el 85% de las personas fueron localizadas con vida, afirmó su director.
Además, logró que la Corte Interamericana de Derechos Humanos conociera y condenara al Estado salvadoreño por la desaparición forzada de las hermanitas Serrano Cruz.
El reencuentro de María también sirvió para reiterar el llamado a la Asamblea Legislativa a que apruebe una ley que permita la localización de personas desaparecidas en el contexto de la Guerra Civil. Además, sostuvieron que urge la creación de un Banco de Perfiles Genéticos.
Por: Prensa Izcanal / ARPAS.