Los globos blancos y negros suben al firmamento lentamente, mientras las velas, las flores, los cantos acompañan la demanda de justicia, verdad y reparación, que sonaron en la conmemoración del 39º aniversario de la Masacre de El Mozote y sitios aledaños, que sin importar los protocolos y disposiciones del COVID-19, que generó menor asistencia, no minimizó la esperanza de los sobrevivientes y familiares para honrar la memoria de las víctimas.
El tiempo pasa irremediablemente, María del Rosario López, sobreviviente del cantón la Joya, Meanguera, Morazán, su vida fue marcada ese diciembre de 1981, cuando perdió a manos del ejército y el Batallón Atlacatl, a 35 miembros de su familia. Ahora, fielmente ha llegado al acto de conmemoración, pero sin su esposo quien falleció en mayo del presente año.
“Fueron 57 años de vida con mi esposo, pero murió en mayo por complicaciones de su pulmón, no tuvo la asistencia (salud) que hubiera querido. Es un momento difícil, me he quedado sola y con mi diabetes, todas las cosas son más difíciles. Tomo té de varias plantas para curarme y algunas pastillas, pero es ahora más difícil”, expresó.
A la pregunta sobre la negativa que recibió el juez Guzmán, en la busca de los archivos militares para el caso de El Mozote y sitios aledaños, comentó: “Realmente, no sé qué le pasó al presidente (Nayib Bukele), porque cuando nos reunimos con él, las peticiones fueron esas, la verdad y la justicia, pero tengo esperanza, en el juicio y el juez, para tener justicia, esa es nuestra fe”, agregó.
El acompañamiento de los embajadores de la Unión Europea (UE), así como, la embajadora de Canadá y la coordinadora de las Naciones Unidas en El Salvador (ONU), se transformó durante el acto, en una muestra de solidaridad y apoyo a la demanda de las víctimas: justicia, verdad, reparación y la garantía de no repetición de estos actos.
Andreu Basols -embajador de la UE en El Salvador- quien se hizo acompañar de los embajadores de Italia, España y Francia, calificó de “demostración de Europa y la comunidad internacional para apoyar a esta comunidad de El Mozote”, y se unió a las peticiones de las víctimas por la justicia.
“Apoyamos el cumplimiento de estos cuatro pilares de la justicia transicional que han sido mencionados: La verdad, la justicia, la reparación y quizás el más importante, las garantías de no repetición, para construir un mundo mejor para todo El Salvador y Centroamérica. Recuerdo, el año pasado cuando venimos, en el acto me emocionaron, dos cosas, la primera es la dignidad de las personas que estaban presentes, gente adulta mayor –en su mayoría- sus familiares y los amigos de las víctimas, gentes de caseríos y cantones de Morazán; me impresionó mucho, la serena y necesaria obstinación de aquellos que quieren la justicia para El Mozote y tantas otras gravísimas violaciones de derechos humanos durante la guerra civil salvadoreña, pero me sorprendió –tengo que decirlo- una cierta indiferencia por parte de sectores importantes de la sociedad salvadoreña, de los responsables políticos y sociales, ante estos aniversarios que se repiten en los años, sin que muchas cosas cambien en el camino de la justicia”, afirmó.
El diplomático aclara que no podían “dar lecciones” sobre resolución de conflictos, pero reseñó los estragos de la Segunda Guerra Mundial y el establecimiento del tribunal de Nuremberg, que terminó en la designación del 9 de diciembre, como la lucha internacional contra el genocidio y crímenes de lesa humanidad, por las “gravísimas violaciones a los derechos humanos”.
La coordinadora residente del Sistema de las Naciones Unidas en El Salvador, Birgit Gerstenberg, manifestó en su intervención, que el mes de diciembre resguarda fechas muy importantes para la humanidad y la búsqueda de la reconciliación y la paz. Al señalar la conmemoración de la Convención de Derechos Humanos, por tanto, era una obligación visitar y honrar a las víctimas de El Mozote, que buscan la verdad, la justicia y la reparación.
“Son ahora 39 años –es increíble decirlo- y esperamos este año que nos espera, buenas nuevas. En un trabajo de reconciliación y de justicia, un trabajo de verdad y reparación de las víctimas, Y es por esto, que estamos aquí, para dar testimonio de nuestra voluntad de apoyar a la ciudadanía salvadoreña, todos esos esfuerzos desde el Estado de Derecho y de instituciones como la Procuraduría para la Defensa de los Derechos Humanos (PDDH) es preciso honrar a las víctimas viniendo a El Mozote, a quienes siguen buscando la verdad, la justicia y la reparación”, dijo.
Sobre el proceso judicial, la coordinadora de la ONU valoró que, aunque el caso haya avanzado sigue siendo un “gran descontento”, que después de 40 años las víctimas no hayan recibido lo que debemos como derecho.
“Quiero asegurarles que esto no es así, porque nosotros no solamente somos seres humanos que vivimos el momento, si no también, nos componemos de nuestro pasado que nos lleva a nuestro presente y este a su vez, a nuestro futuro. Estamos por eso acá y hasta cuando sea necesario vendremos y volveremos con la decisión de acompañar a las víctimas de la masacre y otras violaciones graves que han ocurrido en el conflicto armado interno. La verdad, justicia y reparación de las víctimas no deben tener obstáculos y deben de conseguirse aunque pase el tiempo, la consolidación de la paz, está incompleta sino se da respuesta a las víctimas, sino le hacen justicia, sino se destaca la verdad”, acotó.
Birgit Gerstenberg señaló que el rol de las naciones Unidas (ONU) era prestar asistencia al Estado y la sociedad de los Estados miembro, y que en el tema de justicia transicional estaban trabajando para consolidar un proyecto para las víctimas de El Mozote y otros casos.
“Estamos muy cerca de completar un fondo para un proyecto financiado por la reconstrucción de la paz, es el primer proyecto de esta índole, por 1,500.000.00 dólares, para trabajar temas de justicia transicional, aportando a las instituciones que juegan un rol y la sociedad civil, incluyendo los archivos de las ONU en Nueva York, y otros lugares en Estados Unidos. Ese proyecto debe ser manejado de forma muy transparente, muy en comunicación con las víctimas de El Mozote y las organizaciones de víctimas del conflicto armado, temas claves y el tema de la memoria, cuenten conmigo para el año siguiente y próximo, y cuantos sean necesarios. Porque la oportunidad de recordar a más de mil personas, recordar que vivimos en una sociedad que debe respetar el pasado y honrar las víctimas y es algo que debe recordarse”, manifestó.
Los abogados de la parte acusadora, David Morales, de CRISTOSAL, y Wilfredo Medrano, de la Asociación Tutela Legal “Dra. María Julia Hernández, que recibieron además un reconocimiento de la Asociación Promotora de los Derechos Humanos de El Mozote, afirmaron la continuidad del trabajo con las víctimas.
“Son obstáculos y retrocesos muy preocupantes que han llamado la atención de organismos internacionales de derechos humanos. Porque es inadmisible que el asesinato de mil personas no sea objeto de justicia en El Salvador. Hemos lamentado que el gobierno actual, que supuso un relevo generacional, también se ha convertido en un Gobierno cómplice de la impunidad que protege a los criminales de la gran masacre”, afirmó Morales.
Mientras, Wilfredo Medrano consideró: “Son 39 años de total impunidad, que envía un mensaje a las autoridades judiciales de este país, sobre ejercer una pronta y cumplida justicia. Porque es una vergüenza que tengamos que recurrir a instancias internacionales para obtener justicia y la prueba es que pasaron 39 años, para el juzgamiento de 16 militares de alto rango, que ya deberían estar presos y mucho antes, pero no se ha hecho nada y al contrario hay acciones dilatorias, que incluyen al Ejecutivo que ha bloqueado las inspecciones y la justicia constitucional”, agregó. En el acto fue reconocido también, el trabajo del procurador de derechos humanos, Apolonio Tobar, quien se comprometió con la población de El Mozote, en la búsqueda de la justicia, así como otros casos denunciados ante la Fiscalía General de la República, que se encuentran pendientes de investigación.
“Nos van a seguir ofendiendo, nos van a seguir insultando –les digo, pues bienvenido- vamos a seguir trabajando en lo que debe hacerse por la justicia y en cumplimiento del mandato de la Procuraduría, que es estar del lado de las víctimas. Las víctimas necesitan saber quiénes fueron los responsables, ¿por qué se ordenó? se necesitan respuestas”, puntualizó el procurador.
La masacre de El Mozote y sitios aledaños ha sido calificada como una de las masacres más crueles y brutales ocurridas en el Siglo XX, en América Latina, que ha sobrecogido a miles de personas en el mundo, por lo que, garantizar que estos hechos de violencia contra la población civil, no vuelvan a ocurrir se necesita de la Ley de Justicia Transicional.
Por: Co Latino.